Es bien sabido que las y los consumidores Millenials ya no buscan acumular bienes tanto como sus padres o sus abuelos; en cambio -y esto se acentúa entre más jóvenes son- sus hábitos de consumo se inclinan hacia pagar por experiencias y recuerdos de grandes momentos; Por eso cada vez más es importante que al momento de montar un bar, cantina, restaurante o cualquier tipo de local en donde se sirva alcohol, debemos tener en cuenta que quizá maximizar nuestras ganancias no se trata de vender más bebidas, sino de vender mejor.
En mi larga experiencia, que abarca desde mesero novicio hasta dueño de varios bares, he observado cómo han cambiado las y los consumidores y podría asegurarte que estos cambios son buenos para nuestro negocio.
El gran secreto es que las personas jóvenes ahora asisten a lugares únicos que les prometen experiencias inolvidables, el público está dispuesto a pagar por estar ahí, lo cual mejora muchísimo los márgenes de ganancia. Si quieres subirte a esta tendencia que reportará más beneficios a todos, es posible empezar con estos cincos grandes aprendizajes que he tenido en mi camino como experto en la vida nocturna de todo México:
1.- Crea un concepto
Suena obvio, pero no lo es tanto; al crear un concepto irrepetible para tu bar te aseguras de darle a las y los consumidores razones para volver ahí. ¿Qué es un concepto? Una idea unificada que marque cada aspecto de tu negocio. Por ejemplo, quien inventó el primer Sport bar pensó en crear un lugar diseñado para que ahí se pueda disfrutar cualquier partido de cualquier deporte. Inspirado por esa idea tan básica, comenzó a decorar con motivos deportivos como balones, fotos, estadísticas, parafernalia ¡Lo que se te ocurra mientras tenga que ver con deporte! Después uniformó a su equipo de servicio con camisetas de jugadores, famosos, etc. Sus bebidas idealmente fueron temáticas y únicas, algo que no podía encontrarse en ningún otro bar. Así el público comenzó a llegar y ese lugar empezó a distinguirse de todos los demás.
Un concepto no tiene que ser tan grandilocuente, sino que puede ser algo muy íntimo, pero único, como una gran atención al cliente o a algún otro detalle. Por ejemplo, mi tío José Miguel recuerdo que iba siempre a la misma cantina, aunque quedara muy lejos de su casa. Durante años no entendí por qué, pero cuando le acompañé encontré la razón; un tesoro único e irrepetible: me di cuenta que el dueño del lugar tenía la mejor conversación de la ciudad sobre Rock&Roll, género que también poblaba el playlist del local. Mi tío amaba ir allí a recordar aquella música de su juventud.
2.- Crea un buen ambiente
El ambiente tiene que cumplir dos características: debe ser agradable y divertido. Para ser agradable los comensales deben de sentirse en un lugar seguro: nadie disfruta los bares y cantinas llenas de personas inoportunas que ya se han pasado de copas, sucias o hasta peligrosas; la mera perspectiva de verse envueltos en peleas sin motivo o de ser víctimas de acoso de desconocidos aleja a las nuevas generaciones de esos lugares.
En segundo lugar, busquemos que el lugar sea divertido, por lo que debemos preguntarnos qué es lo quiere hacer el público de nuestros alrededores cuando va a un bar: ¿Quiere charlar? Entonces debemos tener música a nivel moderado, asientos cómodos e iluminación suficiente, además de una temperatura agradable; ni muy fría ni muy caliente. ¿Quiere bailar? Entonces debemos tener un espacio amplio al centro, música alta, que retumbe, muy buena ventilación y flujo de aire y luces de fiesta. ¿Va a escuchar cierto tipo de música? ¿Va a ver algo espectacular? ¿Va a sentirse parte de un grupo o de una comunidad? ¿Va a tomar o a comer algo que sólo puede tomar o comer ahí? Piensa en qué puede parecerle divertido a la mayoría de tus consumidores y asegúrate de que existan las mejores condiciones para ello.
3.- Construye una experiencia Instagrameable
Si tu ambiente es llamativo y hace felices a tus comensales, comenzarán a hacerte publicidad online gratis y subirán fotos de su velada a Instagram mencionándote; te recomiendo que prepares el lugar previamente pensando en ello. Asegúrate de tener en algún lugar con buena iluminación y algo llamativo como un letrero neón, alguna serie de luces, un mural, una frase ¡o lo que sea! pero que sea muy fotografiable y pensado para Selfies. Además, recuerda que las mejores fotos las toma la gente sobria, por lo que procura llamar la atención sobre el lugar.
4.- Dales razones para regresar
El dicho dice “uno siempre vuelve a los lugares en donde fue feliz” y en nuestro caso eso es más que cierto; quien tuvo una buena atención, estuvo en un lugar único que le inspiró, del que tomó fotos, en el que encontró algo que rompió su rutina y que recordará por siempre, definitivamente volverá
Por ello te recomendamos que además de todo el ambiente les hagas sentir como en casa, genera confianza con ellos y si llegan a pasarse de tragos atiéndelos y protégelos. Sólo así generarán buenos recuerdos del lugar.
Con una buena atención, un gran ambiente, un concepto bien pensado y una carta de bebidas acorde a todo lo anterior, verás que marcas la diferencia con tus clientes.